28 de febrero de 2012

Ninguna como ella.

Es que mujeres hay muchas pero ninguna como ella. Una mujer y su corazón con la capacidad de dar tanto amor. Una mujer con buena intención dispuesta a todo por cuidar esta unión. Una mujer con esa convicción. Una mujer con tanta compasión para aceptarme tal y como soy. Con mis defectos con mis virtudes. Mi amor es solamente tuyo no lo dudes.
Mi amor es para tí y vos sos para mí. Te quiero hacer feliz, ya basta de sufrir. Es hora de empezar a amar y verte sonreír. Perdona mis errores, yo cambiaré, no llores. Cada tormenta nos hará un poco mejores. Nunca imaginé enamorarme así. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario